Los tipos de mortero más importantes en construcción

Como ha sucedido con la gran mayoría de los ámbitos en estas últimas décadas, tanto la construcción como la albañilería han ido evolucionando a pasos agigantados. Nuevas técnicas, nuevos materiales, nuevos procedimientos… Todo para garantizar siempre obtener los mejores resultados. Uno de los materiales más importantes en este sector es el mortero, por su versatilidad y su facilidad de uso, ¡y también ha evolucionado! Hoy vamos a descubrirlo todo sobre este, así como los diferentes tipos de mortero que hay. ¡Sigue leyendo!

Breve definición de mortero

Comencemos, cómo no, con lo más básico: ¿qué es exactamente el mortero? Según señala la Real Academia de la Lengua Española, estamos hablando de una “masa constituida por arena, conglomerante y agua”, que, además, puede llevar diferentes aditivos. Es decir, una mezcla homogénea que nos permite unir elementos dentro de la construcción, como ladrillos entre sí, hormigón, piedra, bloques…

No solo eso, sino que también nos permite construir muros que deban soportar tanto una carga pesada como las condiciones climáticas, o tabiques, o incluso rellenar espacios. Por supuesto, también se usa para revestir paredes, y para multitud de tareas dentro del ámbito de la albañilería. Y es que sus propiedades principales son las siguientes: resistencia, durabilidad, adherencia y estanqueidad. Pero ¿sabías que sus propiedades exactas y concretas dependen en buena medida del tipo de mortero que uses? Porque, en efecto, hay diferentes tipos. Y justo en eso vamos a profundizar en este texto, puesto que vamos a pasar a ver los morteros más usados ahora mismo.

Mortero de cemento

Comenzamos con uno de los morteros más usados, el de cemento. En este caso, su aglomerante es el cemento, que se mezcla tanto con agua como con arena. El punto positivo de usar cemento es que ofrece una buena durabilidad y una resistencia increíble a la compresión; de esta manera, se puede usar para todas esas aplicaciones en las que se sabe que va a haber una carga importante de peso.

Se usa para muchas cosas: construir muros y estructuras, revertir superficies, unir ladrillos… Y debes saber que, dentro del mortero de cemento, hay distintas variables que se usan para cosas diferentes entre sí.

Mortero de cal

El mortero de cal es un tipo de mortero que ha sido muy utilizado durante siglos en el mundo de la construcción. Como su propio nombre indica, tiene como aglomerante la cal, que proviene de la piedra caliza. En este caso, se suele utilizar por su apreciada flexibilidad, así como la capacidad de transpiración que tiene. Al permitir la liberación de humedad, evita que las paredes tengan problemas de este estilo, así como la condensación del agua. Es por eso por lo que se suele usar para restaurar o conservar estructuras antiguas.

No obstante, debido a que tiene menos resistencia a la compresión, no se usa para construir muros o estructuras. Aunque tiene como ventaja su flexibilidad, convirtiéndose en un material ideal para estructuras que pueden experimentar movimientos.

Mortero de yeso

El mortero de yeso es capaz de endurecerse muy rápidamente, algo muy recomendable cuando hablamos de construcciones interiores en las que se necesita cierta ligereza. Es por eso por lo que se suele usar para revestir todo tipo de paredes o techos, e incluso permite crear superficies decorativas. Por ejemplo, podrás encontrarlo en molduras del techo. No obstante, es muy sensible al agua, con lo cual no es apto ni para exteriores ni para estancias en las que vaya a haber mucha humedad.

Mortero seco

Pasamos ahora a hablar del mortero seco, que también se puede encontrar con el nombre de mortero premezclado. Esta es una mezcla moderna, que se suele encontrar seca pero, a la hora de trabajarla con ella, es cuando se le echa agua para poder manejarlo. Básicamente, es una premezcla que te evita trabajo a la hora de preparar tú la mezcla completa, ahorrándote así tanto esfuerzo como tiempo.

Sus usos son los mismos que el mortero de cemento, pero con esa facilidad de uso añadida que tanto valorarás en el día a día.

Mortero monocapa

¿Has oído en alguna ocasión hablar del mortero monocapa? Hablamos de un tipo de mortero cuyo uso se suele restringir al ámbito del revestimiento de las fachadas de los edificios. Tiene la ventaja de añadida de que se aplica en una sola capa, además de que te permite encontrarlo en una gran cantidad tanto de texturas como de colores.

Es resistente tanto al clima como a la humedad, y es precisamente por eso por lo que se usa en las fachadas. En ocasiones, incluso se puede combinar con otro aislamiento térmico para mejorar aún más la eficiencia energética de los edificios.

Mortero refractario

Por último, no podemos dejar de hablar del conocido como mortero refractario. Este está específicamente diseñado para soportar las temperaturas más altas, de ahí que se use para construir estructuras en las que la resistencia al calor va a ser crítica. Por ejemplo, chimeneas, calderas o incluso en la construcción de hornos. Además, ofrece un buen aislamiento térmico.

Mortero mixto

Combinando las propiedades del cemento y la cal, este mortero ofrece una mezcla equilibrada de resistencia y flexibilidad. Es adecuado para una amplia gama de aplicaciones en construcción, proporcionando durabilidad sin comprometer demasiado la capacidad del mortero para manejar pequeños movimientos estructurales.

Morteros especiales para usos específicos

En la construcción, existen morteros especializados diseñados para situaciones y propósitos específicos. Por ejemplo, el mortero epoxi se destaca por su resistencia a productos químicos y su capacidad para adherirse a superficies no porosas, lo que lo hace ideal para entornos industriales o áreas con alta exposición a agentes corrosivos. Otro ejemplo es el mortero autonivelante, que se utiliza para obtener superficies perfectamente planas, siendo ideal en suelos comerciales o industriales. Asimismo, el mortero refractario, del que ya hemos hablado, es esencial en la construcción de hornos, chimeneas y revestimientos que requieren soportar altas temperaturas.

Consideraciones al elegir el tipo de mortero en proyectos de construcción

La elección del tipo de mortero depende de varios factores cruciales. Considerar la resistencia requerida, la durabilidad, la adherencia a los materiales de construcción, las condiciones ambientales y la finalidad del proyecto es esencial. Es fundamental evaluar la compatibilidad del mortero con los materiales a unir, así como su aplicación, ya sea en interiores, exteriores, estructurales o decorativos. La planificación cuidadosa y la comprensión de las propiedades de cada tipo de mortero garantizan la selección más adecuada para lograr la integridad y la longevidad de la construcción.

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Diferencias entre mortero y cemento

Pese a que en ocasiones podamos confundir mortero y cemento, debes saber que son dos materiales totalmente diferentes entre sí. Porque el cemento es uno de los componentes del mortero, pero no son lo mismo.

El cemento es un aglutinante hidráulico que, al mezclarse con agua, se endurece. Por otra parte, el mortero es una mezcla de un aglutinante (que puede ser o no cemento), agua, arena y otros aditivos.

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