El concepto de solar es muy conocido tanto en el contexto de la planificación territorial como en el de construcción y urbanismo. Pero ¿te has preguntado en alguna ocasión a qué hace referencia exactamente? Puede llegar a ser un concepto muy técnico, pero es fácil de comprender una vez que se conoce su definición. Y es precisamente por eso por lo que hoy queremos ahondar en qué es un solar, así como todas sus características básicas y qué es lo que le diferencia de una finca, una parcela o el concepto de suelo urbano. ¡No te lo pierdas!
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Definición de solar
Comencemos por el principio, para así sentar mejor las bases: cuando hablamos de un solar, estamos refiriéndonos a una parcela de terreno que se encuentra dentro de un área urbana que se ha destinado a la construcción de edificaciones, pero que, en ese momento, se encuentra totalmente vacía.
Pese a que el solar se encuentre sin edificar, sí que puede tener ciertos servicios considerados básicos por la normativa vigente: alumbrado, agua potable, alcantarillado y conexión a redes de telecomunicaciones. Es más, es crucial que se encuentre vinculado a las calles y redes que le rodean para que se considere un solar como tal.
Es decir, que estamos hablando de terrenos que se van a destinar a la construcción de viviendas o comercios, pero que aún no tienen un proyecto planificado. Son suelos que se pueden usar para fines constructivos, siempre y cuando sigan la normativa pautada por el Ayuntamiento y por el resto de las administraciones pertinentes. Como dato extra, debes saber que no se puede edificar en ningún terreno que no haya sido previamente catalogado como solar.
Características de un solar
Hay ciertos parámetros fundamentales con los que debe cumplir cualquier solar, pese a que puedan variar en tamaño, forma o ubicación. Estos son los siguientes:
- Potencial constructivo: pese a que se encuentren vacíos, se debe poder construir en ellos. Da igual si la finalidad es residencial, industrial o comercial, pero se debe poder construir en ellos.
- Deben estar registrados en el catastro municipal, así como contar con su referencial catastral para poder identificarlos. Normalmente, en ella se indica también de quién es la propiedad del suelo.
- Es imprescindible que tengan acceso a servicios básicos, algo en lo que profundizaremos a continuación.
- Deben encontrarse siempre en áreas urbanas o en zonas urbanizables. Esto garantizará también que haya infraestructuras cercanas y que ya haya servicios básicos disponibles.
- Además, deben cumplir siempre con la normativa urbanística vigente en esa zona. Según esta, se pautarán los usos permitidos, las densidades, la altura máxima… Entre otros aspectos que son cruciales para su posterior desarrollo.
Servicios básicos que debe ofrecer un solar
Como hemos señalado, una de las características indispensables de un solar es que tengan unos servicios básicos, como:
- Acceso a la red eléctrica.
- Suministro de agua potable.
- Conexión al sistema de alcantarillado.
- Acceso a las redes de telecomunicaciones.
Además, hay ocasiones en las que también se exige que tengan acceso a servicios de calefacción o gas natural, para así garantizar el confort de la zona.
Diferencia entre solar y finca
Pasemos ahora a una de las grandes dudas que surgen cuando se habla de solar, y es su diferencia con otros conceptos como finca, parcela y suelo urbano.
En el caso de la finca, esta hace referencia a un Registro de la Propiedad ya existente. Es decir, que es un término que se enmarca en la legislación y que nos habla no solo de una propiedad con límites delimitados, sino también que tiene un propietario. Este puede ser una persona legal o una persona jurídica, e incluso puede ser una administración pública, como un Ayuntamiento. Ahora mismo, cualquier inmueble se puede considerar una finca.
Diferencia entre solar y parcela
Y ¿en qué podemos diferenciar un solar de una parcela? De nuevo, cuando hablamos de parcela nos estamos refiriendo a algo más general. Son superficies de terreno que se encuentran delimitados por unas lindes, independientemente de dónde se encuentren, si en un entorno urbano o no. Además, la parcela puede estar vacía o edificada, dependiendo de la situación concreta.
Sí es cierto que, a nivel de legislación, son términos que se pueden llegar a asemejar. La diferencia clave es que el solar siempre se encuentra dentro de lo que consideramos suelo urbano y que, por lo tanto, debe contar siempre con servicios básicos.
Diferencia entre solar y suelo urbano
Como ya hemos señalado, el solar se encuentra siempre dentro de lo que conocemos como suelo urbano. El suelo urbano es aquel que forma parte de la ciudad; para que este pueda ser considerado un solar, debe cumplir, además, con esos servicios básicos de los que hemos hablado a lo largo del texto.
Son conceptos complejos pero, en cuanto se tienen claras las diferencias, es mucho más sencillo discernir unos de otros.
