La arquitectura moderna está viviendo un proceso continuo de búsqueda de materiales que combinen una alta resistencia con durabilidad y, además, un diseño que apueste por el valor estético. En este escenario, ha surgido el acero corten como una de las opciones más atractivas en todos los sentidos, tanto para exteriores como para interiores. Tiene un acabado oxidado natural, es capaz de resistir sin problema a condiciones extremas y, además, esa estética industrial cada vez está ganando más adeptos. ¿Qué es lo que lo hace tan especial?, puede que te preguntes. Sigue leyendo, porque te lo vamos a contar todo.
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¿Qué es el acero corten y cómo se fabrica?
El acero corten, que se conoce también como acero de resistencia a la corrosión mejorada, es una aleación que se desarrolló originalmente en la década de 1930. Lo lanzó la compañía United States Steel, y su nombre comercial es COR-TEN. Este hace referencia justo a sus dos propiedades básicas: resistencia a la corrosión y resistencia a la tracción, pero en inglés.
A diferencia del acero tradicional, el acero corten forma una pátina de óxido superficial que actúa como una barrera protectora frente a la corrosión. Gracias a eso, no es necesario aplicar ningún tipo de pintura ni de recubrimientos adicionales. Al someterlo a esa oxidación controlada, nos aseguramos un material de una mayor calidad. No compromete a la estructura del material, ni daña en ningún momento sus capacidades. Todo lo contrario: ofrece algunas mejoras significativas. Como esa apariencia cálida y rugosa, tan característica.
Este tipo de acero tiene un proceso de fabricación similar al de otros aceros al carbono, pero con su composición química alterada. Se añaden elementos como cobre, cromo, fósforo, silicio o níquel, que son los que acaban favoreciendo la creación de esa pátina protectora. Esta se va desarrollando cuando al acero se expone de forma cíclica tanto a la humedad como al secado. En condiciones normales, esta oxidación se estabiliza tras unos seis o doce meses.
Es interesante señalar que hay distintos grados de acero corten, y que cada uno de ellos tienen una aplicación distinta. Mientras que hay acero estructural, también hay otro diseñado para aplicaciones decorativas, otro para proyectos navales… Así que es algo que se ha de tener en cuenta.
Características y ventajas del acero corten en construcción
El auge del acero corten no es casualidad, ni mucho menos. Gracias a la combinación de materiales, este acaba por ofrecer una gran cantidad de ventajas funcionales y estéticas que hace que sea totalmente distinto a otras alternativas. A continuación, vamos a hablar de las más relevantes:
- En primer lugar, tiene una alta resistencia a la corrosión gracias a su composición química. Porque es capaz de protegerse a sí mismo de la oxidación. Esto alarga significativamente su vida útil, incluso cuando se usa en fachadas ventiladas.
- A esto hay que añadirle que apenas necesita mantenimiento, puesto que no necesita pintura, ni barniz, ni tratamiento anticorrosivo de vez en cuando. Gracias a eso, tenemos un importante ahorro en este sentido.
- Un punto que juega también a su favor es esa estética industrial. Ofrece un acabado muy cálido y orgánico, tanto en entornos urbanos como rurales. Además, a medida que va envejeciendo tiene ciertos tonos ocres, rojizos y marrones que dan un extra de personalidad al entorno.
- Junto a todo esto, es un material sostenible. Es 100 % reciclable, y su larga durabilidad hace que sea una opción mucho más sostenible.
- No solo es resistente a la corrosión, sino que también ofrece una buena resistencia mecánica. Esto hace que se pueda usar en todo tipo de estructuras.
- Por último, debes saber que gracias al espesor que tiene se puede cortar, soldar, curvar y perforar de forma bastante sencilla. Esto hace que se puedan llevar a cabo diseños personalizados y soluciones arquitectónicas bastante complejas.
Aplicaciones del acero corten en arquitectura y urbanismo
Como hemos señalado antes, y como podrás imaginar al ver sus ventajas, el acero corten ha ido ganando protagonismo en una amplia gama de proyectos de arquitectura. Es más, sus aplicaciones son muy diversas:
- Fachadas ventiladas y revestimiento, tanto por su resistencia como por ese estilo tan distintivo que aporta a los edificios.
- Esculturas y arte urbano, gracias a la capacidad expresiva que tiene y a lo duradero que es. Un escultor famoso en este sentido es el estadounidense Richard Serra, que ha hecho del acero corten una de sus señas de identidad.
- Puentes y estructuras al aire libre, debido a su resistencia a condiciones extremas. Además, ese aspecto industrial encaja muy bien en todo tipo de entornos rurales.
- Mobiliario urbano, como papeleras, bancos o jardineras.
- Arquitectura residencial y paisajismo, tanto en detalles decorativos como en otros elementos como muros o caminos.
Mantenimiento y cuidados para estructuras de acero corten
Aunque el acero corten se promociona como un material de bajo mantenimiento, y lo es, sí que hay aspectos que deben tenerse en cuenta. El primero de ellos es que la pátina se debe formar adecuadamente, con lo cual debe haber una correcta exposición tanto a los ciclos de humedad como a secados. En climas muy húmedos, podríamos encontrar una corrosión acelerada y una estabilización incorrecta.
Además, se debe evitar el contacto con elementos que no sean drenantes, ya sea agua estancada o zonas sin ventilación, porque esto puede dificultar también el secado. A esto hemos de añadirle que es importante que, durante el proceso de oxidación, se protejan todos los elementos que hay alrededor. Porque el acero corten puede dejar algo de óxido sobre otros materiales, especialmente en sus primeras etapas.
Más allá de eso, hay ciertos tratamientos selladores o con ceras especiales que son opcionales, y que lo que buscan es estabilizar el color o reducir que haya problemas en el proceso de patinado. Y, por último, puede ser útil realizar limpiezas de vez en cuando con agua, sin productos agresivos. De ese modo, se puede eliminar el polvo, residuos orgánicos o excrementos de aves, para mantener su estética impoluta.
